La mira,
la toca, la pisa, la palpa.
Se escapa.
La lame, la muerde, la coge, la rompe.
La aplasta.
Intenta atraparla.
La empuja, la arrastra…
hasta derramarla.
Se queda sin magia.
Se queda sin agua.
Se queda sin nada.
Pero King no para
de ladrarle al agua
Fotos y texto: Manuel Belda
Querido amigo, tu magia me llega a traves de tus palabras y me alegra el alma. Gracias!
Hola, me gusta mucho sus ideas, soy de un campo en la frontera sur de la Republica Dominicana. Una zona muy pobre, en donde esta idea teirnda un uso exelente y a buen costo. Me gustaria saber mas.